El tequila Excellia ha fusionado en su sabor tres regiones y dos culturas: la mexicana y la francesa.
Las piñas del agave azul que originan este licor se recogen en la mexicana Jalisco, donde cortadas a mano, se cuecen lentamente en los tradicionales hornos de adobe.
Tras su destilado, al estilo más tradicional de la región, se traslada a Burdeos y Cognac, en Francia, donde se aplican técnicas utilizadas para la elaboración del vino con la intención de finalizar su proceso de añejamiento.
De esta forma, se han creado tres tipos de tequila Excellia: el blanco (cuyo color transparente marca parte de su esencia), el reposado (el tequila perfecto para tomar sólo con hielo y también para utilizarlo como base de cócteles) y el añejo (perfecto para tomar a temperatura ambiente).
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